El Aceite Rick Simpson o (RSO por sus siglas en inglés) es la tintura de marihuana más popular en muchos lugares y de una sencilla fabricación. Además cuenta con amplios usos terapéuticos y medicinales. También existen varias alternativas para consumirlo: desde la vaporización, la ingesta oral y sublingual. Cada una con un beneficio y efecto en particular.

Una tintura de marihuana (RSO) en pocas palabras es una maceración en alcohol isopropílico del material vegetal, principalmente la flor que es donde se encuentra la mayor concentración de cannabinoides. Después, se aplica calor en moderación para evaporar el alcohol. El resultado es un aceite viscoso, donde quedan disueltos los cannabinoides, terpenos y demás moléculas de la marihuana.

Este tipo de tintura de marihuana es la más usada por pacientes que practican el autocultivo. Por un lado es posible hacer una extracción segura para uso humano de manera casera, y la posibilidad de controlar el cultivo les asegura que en la planta de cannabis no serán utilizadas sustancias nocivas para la salud. Además, la tintura de marihuana les permite hacer un uso más preciso en cuanto a dosificación y tiempo de acción de los cannabinoides.

La eficacia de la tintura de marihuana estará determinada por la calidad de la flor, el proceso de extracción y el método de preservación de la tintura. Recordemos que los cannabinoides son sensibles a la luz y al calor, factores que se deben controlar y vigilar constantemente. 

A pesar de estos múltiples beneficios, el cultivo de marihuana sin fines de comercio continúa siendo un delito en muchos países del mundo (incluido México), así que La Dosis expresamente recomienda a la gente no meterse en problemas con la autoridad (en la medida de lo posible).

¿Cómo prepararlo?

La siguiente receta para tintura de marihuana la tomamos del sitio leafy.com. Si gustas, también puedes consultar y descargar totalmente gratis el manual de la organización Autocultivo Medicinal en México, el cual viene ilustrado y un poco más detallado. NOTA: El alcohol es altamente flamable, es importante hacer lo siguiente en un área ventilada.

Para producir 60 gramos de tintura de marihuana necesitas:

  • 1 onza de flor de marihuana seca

  • 2 galones de solvente (alcohol isopropílico)

  • 1 cubeta de 5 galones

  • 1 recipiente hondo

  • 1 cuchara de madera

  • 1 manta o malla para quesos o estopilla

  • 1 arrocera*

  • 1 jeringa punta cateter

Procedimiento:

  1. Limpia toda la marihuana. Asegúrate de que el materia vegetal esté libre de ramas, cocos y hojas secas sin tricomas. Se cuidadoso al momento de manejar la flor de marihuana para degradar los tricomas lo menos posible.

  2. De preferencia, pesas el total de flor a extraer. Esto permite un control de calidad con el paso del tiempo y una experimentación más precisa.

  3. Colocar la marihuana en la cubeta y verter el alcohol hasta que el material vegetal esté totalmente cubierto. Lo recomendable es usar 1 parte de marihuana por dos de alcohol.

  4. Revolver y triturar la marihuana con la cuchara de madera. Mientras, agregar más alcohol a la mezcla. Continuar revolviendo por 3 minutos. Los cannabinoides comienzan a disolverse.

  5. Drenar el alcohol de la planta hacia el recipiente hondo usando la manta o malla para quesos o estopilla. Coloca la marihuana de regreso en la cubeta y añade más alcohol.

  6. Repetir el paso 2 por otros tres minutos.

  7. Una vez más, drenar el alcohol en el recipiente hondo usando la malla para quesos.

  8. Verter el alcohol en la arrocera hasta que éste quede a ¾ de su capacidad total. Enciende la fuente de calor que vayas a utilizar. Usar el calor para acelerar la evaporación del alcohol. También se puede usar ventilación extra.

    *NOTA: el objetivo de utilizar una arrocera es mantener una fuente de calor lenta y nivelada a lo largo de su superficie. Es muy importante controlar el calor para no sobrepasar los 80°C. El alcohol es altamente flamable.

    Algunos usan un “baño maría” en lugar de la arrocera. Sin embargo, el calor puede ser menos preciso en ese caso.

  9. Mientras el calor hace su trabajo, el alcohol se comenzará a evaporar. Continuar agregando el alcohol restante.

  10. Una vez el alcohol se haya retirado, es necesario descarboxilar los cannabinoides para obtener el efecto psicoactivo. Para ello es necesario mantener la temperatura entre 100 y 110 grados.

  11. Por último, utiliza la jeringa para recoger un poco  de la tintura de marihuana restante. La consistencia debe ser viscosa.

Algunos beneficios conocidos:

A diferencia de otras extracciones cuyo producto final puede ser un concentrado más cargado de THC o CBD. El RSO trae de todo.

El efecto particular de la tintura depende de la flor de marihuana utilizada y la forma de preparación y dosis, entre otras cosas. Pero se ha usado con un efecto positivo en los siguientes males:

  • Cáncer

  • Dolor crónico 

  • Esclerosis múltiple

  • Artritis

  • Asma

  • Inflamación

  • Presión arterial alta

  • Depresión

  • Insomnia

En el uso de tintura de marihuana para un padecimiento específico es indispensable conocer con la mayor precisión posible el contenido de cannabinoides y terpenos así como su proporción.

Dosificación

La siguiente orientación sobre la dosificación es una traducción directa del sitio oficial de Rick Simpson. Si bien es posible que hoy en día existan métodos más precisos derivados de la investigación, el valor del método de Simpson es que se acopla a la vida cotidiana de personas cualesquiera. En suma, es una buena base para empezar.

Cabe aclarar que el objetivo de la siguiente forma de dosificación para la tintura de marihuana tiene el objetivo de generar una tolerancia hacia los efectos psicoactivos de la marihuana y hacer del uso de esta tintura lo más cómodo posible. Para establecer dosis orientadas a tratar padecimientos específicos es necesario contar con el apoyo de un profesional de la salud.

“Por lo general, una persona promedio tarda aproximadamente 90 días en ingerir el tratamiento completo de la tintura de marihuana de 60 gramos o 60 ml. Sugiero que la gente comience con tres dosis por día, aproximadamente del tamaño de medio grano de arroz seco de grano corto. El paciente debe tomar esta dosis cada 8 horas, temprano en la mañana, luego nuevamente por la tarde y luego debe tomar su dosis final del día, aproximadamente una hora antes de acostarse. También debe tenerse en cuenta que cuando un paciente comienza a ingerir este aceite, el paciente normalmente no siente los efectos del aceite hasta aproximadamente una hora después de haber tomado su dosis, así que tenga en cuenta este hecho. Una dosis para principiantes como la que estoy describiendo equivaldría aproximadamente a ¼ de gota.

“Después de cuatro días con esta dosis, que debe tomarse tres veces al día, la mayoría de las personas pueden aumentar sus dosis duplicando la dosis cada cuatro días. Al seguir este sencillo procedimiento, muchos pacientes han informado que sintieron que no habían experimentado el subidón que puede causar esta tintura de marihuana. Pero, en realidad, no hay dos iguales y todos tenemos diferentes tolerancias, por lo que algunos podrán aumentar sus dosis más rápidamente que otros. En realidad, incluso si uno llega a sentir lo que comúnmente se conoce como “pacheco”, esto no lo dañará de ninguna manera.

“A una persona promedio le toma entre 3 y 5 semanas llegar al punto en que puede ingerir 1 gramo o 1 ml por día. Una vez que alcanzan esta dosis, pueden continuar a este ritmo hasta que sus problemas médicos estén bajo control. Esto significa que después de que el paciente se haya acostumbrado al uso de tintura de marihuana, cada dosis que se ingiera será de 8 a 9 gotas cada 8 horas y, en muchos casos, he visto pacientes que no han tenido problemas para ingerir aún más. Se necesita una dosis aproximadamente del tamaño de dos granos de arroz seco de grano corto para igualar una gota, por lo que una vez que el paciente se ha acostumbrado al uso de los aceites, en realidad está ingiriendo dosis que equivalen a 16 a 18 granos de arroz por dosis.

“Al usar el método que estoy describiendo, le da a su cuerpo tiempo para desarrollar una tolerancia a este medicamento lentamente y una vez que el paciente se acostumbra a los efectos de lla tintura de marihuana, la mayoría de los pacientes informan que disfrutan tomándolo.

“Todos tenemos diferentes tolerancias para cualquier medicamento y su tamaño o peso corporal tiene poco que ver con su tolerancia a la tintura de marihuana e incluso los niños pueden tomar la misma dosis que los adultos, sin efectos perjudiciales”.

Usos

Una de las ventajas de la tintura de marihuana es su versatilidad. Rick Simpson no necesitó más que untarlo para combatir el cáncer en su piel. Entonces, no queda duda de su potencial en aplicaciones tópicas.

Si así lo prefieres, no necesitas más que ingerirlo y tendrá efectos similares a los de un comestible cannábico. Hay quienes lo diluyen en aceite de coco para hacerlo un poco más agradable. También lo puedes mantener abajo de tu lengua para absorverlo de forma sublingual, la cual es más rápida y efectiva gracias a la gran cantidad de vasos sanguíneos de esta área.

Por otro lado, puedes agregar la tintura de marihuana directamente a una comida, platillo, postre o bebida. Mientras no alteres demasiado la temperatura, el aceite conservará sus propiedades en cualquier medio que se encuentre.

También puedes vaporizarlo, para lo cual probablemente necesites diluirlo un poco en terpenos. Esto funciona como una vía de administración portátil, cómoda e inmediata. Incluso se puede dabear como el resto de los concentrados. Sólo debe cuidarse que no queden rastros de alcohol, o podría generar daños a las vías respiratorias.

La Fundación Daya comparte en su sitio web un sin fin de testimonios de pacientes usuarios de marihuana. A continuación compartimos una recopilación y resumen de algunos de ellos. Recomendamos visitar el sitio web de la Fundación.

Testimonios

Alexander Hernández: mi hija volvió a nacer

“La hija de Alexander se llama Mía y tiene actualmente 1 año y medio de vida. A mediados de 2018 fue diagnosticada de dos graves enfermedades: en un hemisferio del cerebro tiene Esclerosis Tuberosa; en el otro hemisferio tiene Síndrome de Start-Weber. La suma de ambos males le provocó desde los 3 meses padecer convulsiones, espasmos y ausencias. Producto de lo anterior, Mía tuvo que pasar meses hospitalizada en diferentes recintos, entre numerosos exámenes y la espera por diagnósticos inciertos (...) a Alexander le estremeció una de las propuestas terapéuticas: se debía extraer la mitad del cerebro de Mía, en un intento por detener las convulsiones. Alexander y su esposa se resistieron ante semejante propuesta, más aún cuando quedaba claro que Mía tenía problemas en ambos hemisferios cerebrales. Considerando el desalentador panorama, es que como familia optaron por intentar con aceite de cannabis (...) Cuando la niña comenzó a recibir aceite de cannabis, la situación cambió drásticamente. Desde el segundo día de administración, sus efectos positivos fueron notorios. Pasó de tener cerca de 15 convulsiones diarias a no sufrir ninguna. Desde noviembre de 2018 hasta la fecha, (junio de 2019) Mía prácticamente no convulsiona, está mucho más conectada y comienza a intentar dar sus primeros pasos. “Mi hija volvió a nacer” nos dice Alexander, con la mirada llena de optimismo...”

“AL ESTAR ACOSTADA TODO EL DÍA, ME ESTABA APAGANDO DE A POQUITO. EL CANNABIS ME VOLVIÓ LA VIDA”

“Carmen Iriarte fue diagnosticada con escoliosis crónica con luxación de cadera derecha y subluxación de cadera izquierda a los 10 años. Después de una prótesis total y años sin poder caminar, descubrió el cannabis y su vida cambió completamente. (...) “Desde niña siempre caminé con displasia. Con el transcurso de los años ya no podía caminar, porque me dio artrosis. Los dolores eran tan terribles que decidieron ponerme una prótesis completa de cadera y aun así seguía con dolor. Estuve sin caminar hasta que conocí el cannabis”, cuenta.

El reemplazo de cadera fue una de las últimas opciones para Carmen. “Ya me habían operado y seguía mal en ese sentido. Tomaba 30 gotas de tramadol al día, que me provocaban mareos y vómitos”. 

 “Nos acercamos a la Fundación con ignorancia. Llegamos y me explicaron que no me iba a pasar nada malo. Esto no es lo mismo que comprar en la calle. Ahí me alivié, porque que un profesional te explique las cosas, cambia todo. Yo lo único que quería era calmar el dolor”, recuerda.

Al evaluar todas las opciones de acceso al cannabis, decidieron cultivar. “Hicimos el esfuerzo de pedir un crédito y compramos un indoor. Partimos con cuatro plantas, pero que al final salieron dos por errores de principiantes. Igual con esas dos hicimos el aceite y fue increíble el cambio”, afirma Jonathan, [pareja de Carmen]...”

“NOS SENTIMOS ALEGRES, CON CALMA Y MUCHA ESPERANZA POR SU CAMBIO”

“Víctor Oblitas fue diagnosticado con cáncer renal izquierdo con alternación metabólica en calcio hace un mes, con síntomas como ausencia de apetito, pérdida de conciencia y un alto dolor lumbar.

En el hospital mejoró un poco, los doctores lograron bajar la hipercalcemia a rangos normales. Sin embargo, determinaron su desahucio por presencia de metástasis y no apto a cirugía. Fue dado de alta sólo con control del dolor, sin hacer mucho para mejorar su calidad de vida. Víctor seguía sin comer, con una actitud somnolienta, sin ánimo y con tramadol para manejar el dolor.

Su familia decidió acercarse a Fundación Daya Arica para evaluar otras opciones de tratamiento (...) Desde ese momento, Víctor se está tratando exclusivamente con un aceite de cannabis y el cambio ha sido sorprendente. Hoy está activo, no hay somnolencia, conversa sin dificultad, come y acepta líquidos. El nivel de dolor ha bajado a uno, y aunque no camina, siente ganas de pararse, incluso sonríe.

“Nos sentimos alegres con calma y mucha esperanza por su cambio de actitud”, explica su hija. En un periodo más queremos realizar una resonancia magnética para verificar el nivel de neoplasia, tenemos fe de una remisión del tumor, aceptando con responsabilidad cualquiera sea el resultado. Lo recomendamos de todo corazón”, finaliza.”

¿Quién fue Rick Simpson?

Imagen: Alchimia Web

Rick Simpson fue un ingeniero que trabajó durante años en un hospital canadiense en 1997. Un día, mientras recubría las pipas en el cuarto de las calderas, sufrió un desmayo a causa de los vapores tóxicos en la habitación y cayó de la escalera hacia el piso, aterrizando sobre su cabeza.

Por fortuna sobrevivió, pero semanas después aún sufría de zumbidos y dolores de cabeza. Tras enterarse del potencial terapéutico del cannabis, decidió intentarlo. Y funcionó. Luego, en 2003 fue diagnosticado con un tipo de cáncer de piel, ante lo cual comenzó a untarse la tintura de marihuana zen la zona afectada. Y también funcionó.

Desde entonces, hizo de su misión el compartir su conocimiento para ayudar a otros pacientes como él. Así fue que popularizó la técnica de extracción que conocía entre las 5,000 personas a las que asistió.

Simpson también sufrió constante acoso por parte de la policía, pues vio su casa y sus cultivos allanados en múltiples ocasiones.