La vida godín puede tornarse gris, aburrida y a ratos, miserable. Un poco de cannabis es útil para aliviar el estrés y ansiedad que conllevan las fechas de entrega, procesos engorrosos, o la monotonía que adquiere el espacio laboral. Desafortunadamente, estos entornos no reciben bien a los usuarios de drogas ilegales, por lo que persiste un gran estigma hacia nosotros.

Aquí una suerte de manual que el godinato marihuano tendría a bien traer consigo.

Olor y ojos rojos:

El consumo de marihuana es uno de los más evidentes dado que el aroma de la flor es bastante peculiar y escandaloso. Esta es una de las cualidades favoritas de varios, pero también es el principal delator ante cualquier autoridad. También hay que mencionar a “la gafa”, o la vasodilatación en nuestros ojos que provoca se tornen rojos.

Aún cuando hayamos consumido en nuestro tiempo libre, es posible conservar tanto el olor como el peculiar síntoma, y presentarlos en la chamba.

Una forma de evitar que el olor se impregne sería consumir con una camisa distinta a la que usaremos durante el trabajo. Es conveniente fumar en espacios abiertos y con buena ventilación. Y para el ojo rojo están las viejas y confiables gotas.

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"Oye Ramírez, ¿y tú te las truenas?"

Hoy en día en México el consumo de marihuana sin afectar a terceros y en espacios privados, además de no ser delito, está protegido por los derechos humanos de la autodeterminación y del desarrollo de la personalidad. En teoría, esto también debiera castigar la discriminación hacia los usuarios de drogas, entre ellos los pachecos.

Sin embargo, hoy en día esto no es así. Aunque haya varias iniciativas de ley que pretenden regular el cannabis, la sociedad mexicana es bastante conservadora. Por ello, recomendamos mantener a discreción del empleado si decide revelar su consumo. Después de todo, hay jefes, patrones o superiores que también son consumidores.

Cada quien conoce a sus custodios.

Antidoping:

Otro de los obstáculos para los marihuanos de oficina son las pruebas de antidoping. En teoría, estas debieran prevenir que se asista al trabajo bajo la influencia de drogas. El artículo 47 de la Ley Federal de Trabajo establece que: "concurrir el trabajador a sus labores en estado de embriaguez o bajo la influencia de algún narcótico o droga enervante" como una causa justificable para despedir a alguien.

Pero detectar si alguien está bajo los efectos del cannabis es complicado. Para empezar, es posible que haya rastro de cannabinoides en nuestro sistema aún cuando los efectos psicoactivos hayan terminado. Entonces, implementar este tipo de medidas sin tomar esto cuenta implica una violación a la vida privada de las personas, pues pretende normar una conducta que se realiza en sus tiempos libres.

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Cannabis medicinal:

México cuenta desde 2017 con el reconocimiento en la Ley del derecho al acceso al cannabis con fines medicinales, particularmente del cannabinoide CBD. Dependiendo del tipo de condición o enfermedad es la necesidad en cuanto al consumo. Por ejemplo, un paciente de epilepsia requiere portar el aceite en caso de sufrir un ataque, pues este actúa como medicamento de rescate y previene al instante la convulsión.

Las formas de consumo más efectivas, cómodas y portables son la vaporización y el aceite sublingual. Y aunque difícilmente estos delatará al cannabis. Aún así, conviene conocer los derechos de los pacientes en caso de necesitar medicación urgente o inmediata.

Portar en la chamba:

Por último, recordemos que la portación de hasta 5 gramos de cannabis consituyeun delito que no implica una acción penal por parte de la autoridad. A pesar de ello, hay lugares que prohíben explícitamente introducir cualquier droga (el alcohol incluído) como parte de sus normas laborales.

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De encontrarse, esto podría presentar un problema. La mejor forma para defenderte es alegar que esa cantidad representa lo que irías a consumir en tu tiempo libre y en un espacio privado, y que nunca tuviste la intención de consumirlo en el ambiente laboral. Ayudaría a tu caso si no te encuentran donde consumirlo (pipa, papel, etc.)