Si por cualquier razón se empapó tu huato de mota, no lo tires, aún hay forma de salvarlo. Afortunadamente, los cannabinoides son hidrofóbicos. Eso quiere decir que ni el THC ni el CBD de nuestras flores se verán afectados por el agua en ninguna cantidad.

El principal problema con el agua es que los terpenos se deslaven de las flores, con lo que tanto el sabor y el aroma se verán disminuidos. También se corre un gran riesgo: la aparición de hongos. Pero hay varias formas de rescatar la mois si es que manejamos la situación de manera adecuada.

Todo se reduce a paciencia y cuidado

El objetivo principal será lograr tanta evaporación de agua como sea posible a la vez que se cuida de los hongos.

Primero, coloca tu mota mojada en una “servitoalla” o un estante de metal (de preferencia con agujeros en la parte inferior que ayudan a ventilar los cogollos por debajo).

Busca una habitación seca y oscura. Es necesario que haya flujo de aire que ventile el vapor de agua que se vaya desprendiendo y para evitar el crecimiento de hongos. Un par de ventiladores pueden contribuír, solo se debe ser precavido con la distancia entre ellos y nuestras flores.

Dispersa el material vegetal tanto como te sea posible y divide en trozos pequeños los cogollos más grandes para que el agua se evapore con mayor facilidad.

La opción ideal sería añadir una lámpara de luz ultravioleta y apuntarla a nuestra marihuana. La luz ultravioleta esteriliza las superficies con las que entra en contacto, pues elimina de ellas todo rastro de microorganismos como hongos, bacterias e incluso esporas. No así con las partes más profundas (otra razón para trozar las colas más grandes de la mois).

Es muy importante tener cuidado con la luz y no apuntarla a los ojos de ningún ser vivo. La exposición larga de esta radiación es dañina para el organismo e incrementa el riesgo de padecer cáncer, así que se debe manejar con cuidado.

Si no contamos con una lámpara de este tipo, podemos sustituir con una regular. Solo se debe cuidar que la mota no reciba demasiado calor, pues esto es otro factor que contribuye al crecimiento de moho.

Ahora deja a los cogollos descansar. Puede tomar un par de horas o incluso días, dependiendo de la cantidad de agua que contengan. Lo importante es ser paciente y estar al pendiente, pues se está “jugando con los elementos” y tarde o temprano podríamos llevarnos alguna sorpresa indeseada que dejaría nuestra mota completamente inservible.

Por ejemplo, si se detiene el flujo de aire, es muy probable que algún hongo encuentre hogar en nuestras flores. Lo mismo con el calor de la habitación.

Técnica del arroz:  Así como con el celular, se puede aprovechar la capacidad de absorción del arroz para secar las flores. Sólo introduce en un recipiente que permite suficiente circulación de aire y deja reposar con la tapa abierta.

Sin embargo, el uso de materia orgánica incrementa el riesgo de aparición de hongos.

Cuidado con: No lo expongas a fuentes de calor muy agresivas o dañaras los cannabinoides (esto incluye exponer al sol, lo cual siempre se desaconseja).

Si detectas hongos no la consumas ni uses para extracciones o podrías perjudicar severamente tu salud.

¿No quieres esperar para disfrutar de la pachequés? Usa los cogollos mojados par infusionar leche ¡y a volar!

Con información de:

http://boards.cannabis.com/threads/what-do-u-do-if-ur-weed-gets-wet.41398/page-2

https://www.cannabis.info/es/blog/como-salvar-tu-hierba-cuando-se-moja

https://www.quora.com/Will-I-still-get-high-when-I-smoke-weed-after-it-gets-wet