El Blunt es una de las formas para fumar cannabis más populares y ostentosas que existen. Y es que por su gran tamaño, sabor y tipo de hoja ofrecen una experiencia similar al tradicional porro, pero con características especiales. Celebrando a este viejo conocido de los marihuanos, dejamos aquí lo esencial del blunt y una respuesta a la pregunta: ¿fumar en blunt te pone más pacheco?

Historia del blunt: Del tabaco al cáñamo

Esta variante del cigarro está muy relacionada con el tabaco. En un principio, los cigarrillos se forjaban en hojas de palma y de tabaco. Se piensa que su nombre lo adquiere por la marca de cigarrillos Phillies, cuyo producto tamaño “blunt” se caracterizaba por un gran tamaño.

Esta forma de fumar siempre estuvo más asociado a la clase alta de la aristocracia. Y fue durante los años 60, en el seno de un grupo de artistas de la contracultura en San Francisco, California, que se comenzó a combinar con cannabis.

Aunque también tuvo su auge gracias a ciertas agrupaciones de Hip-Hop. Por ejemplo, durante los años 90 el primer álbum de la banda Cypress Hills (1991) incluía un tema llamado “Something for the blunt”. Cypress Hill también ejerció un poco de activismo cannábico al aparecer en la portada de High Times y auto-proclamándose el grupo oficial de rap de NORML, una asociación pro-cannabis en Estados Unidos.

Mucha de la imagen de estos músicos era en torno a la marihuana, y pocos refutarán que su forma de consumo preferida era el blunt.

Sin embargo, no hay quienes preferimos evitar el tabaco, por lo cual hoy en día se pueden forjar blunts con hojas de cáñamo, palma e incluso pétalos de rosa.

¿Fumar blunt te pone más pacheco?

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De entrada, uno podría preferir el blunt por ser de “tamaño familiar”. Gracias a su gran tamaño, uno de estos dura más y provee de caladas más largas. Tampoco se puede dejar de lado el “estilo” o “pose” de fumar un “cigarrote” de marihuana.

Sin embargo, puede que las ventajas del blunt terminen ahí. Pues, a pesar de lo que uno podría pensar, fumar en blunt no necesariamente te pone más pacheco. Un estudio de la Universidad de Columbia encontró que al fumar en porro los niveles de THC en la sangre son en promedio 52% mayores que cuando se fuma en blunt.

De inicio parece contraintuitivo, si estoy fumando más mota, ¿cómo me pone menos? Existen algunas explicaciones para ello.

Una tiene que ver con la biodisponibilidad. Como ya lo hemos platicado, no importa que tanto THC inhales, sino cuánto de esta sustancia puede absorber tu cuerpo. Es por ello que aguantarse el humo del toque no incrementa la cantidad de cannabinoides que tus pulmones pueden absorber. Entonces da igual si es un Marley o uno flaquito, el resultado será más o menos similar.

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Luego, debemos mencionar que ese estudio se realizó únicamente con blunts de tabaco. Por lo que es probable que la nicotina haya “acaparado“ un poco del espacio disponible en la sangre para el THC. Lo mismo con otras partículas producto de la combustión, pues estas también aumentan cuando se fuma en mayor cantidad.

¡Oye, pero a mí sí me pone más pacheco el blunt!

Pues sí, es posible sentir los efectos con mayor intensidad gracias al blunt, pero no gracias al THC. Otros estudios encontraron que la nicotina estimula ciertos receptores en el cerebro de tal forma que el cannabinoide actúa con mayor efectividad. Pero a este efecto se crea tolerancia rápidamente, por lo que sólo será así las primeras ocasiones.

De cualquier forma, el blunt siempre tendrá un lugar especial en nuestros corazones. Ya sea para celebrar una ocasión especial, compartir con la banda, o regalarte un momento a solas con un gran cigarro de marihuana.

 

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