Los concentrados son una de las últimas sensaciones del mundo del cannabis. Su alta potencia y suculenta gama de sabores se ganaron rápidamente el corazón de muchos consumidores. A continuación te dejamos algunos conceptos que debes conocer este vasto océano de miel. Foto: Cannabis Now.

Uno de los concentrados más populares es el BHO, al que muchos se refieren por el nombre de wax. Este se obtiene a partir de una extracción con gas butano, el cual posteriormente es purgado en una olla de vacío especial. Su producción casera implica el riesgo de que al wax le queden rastros de solventes dañinos para la salud.

De este proceso se pueden obtener diferentes productos, cada uno con texturas, sabores y efectos diferentes entre sí:

El shatter

Foto: Cannabis Now

El shatter es un concentrado que retiene la estructura cristalina, lo que permite a la luz solar pasar a través del concentrado. Gracias a ello el shatter es bastante translúcido, casi transparente. Cuando le aplicas presión se quiebra, de ahí su nombre (shatter=quebrar).

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Debido a que su proceso de purgado es relativamente rápido, le permite guardar una cantidad considerable de terpenos y cannabinoides, resultando en sabors bastante completos y una potencia inigualable.

La textura de cera o “wax” (de donde el grupo general de concentrados tomó el nombre) es lo que ocurre cuando la estructura cristalina del concentrado se pierde cuando se agita el concentrado durante el proceso de destilado. El resultado es un producto con variadas consistencias (algunas hay que decir, pueden ser bastante subjetivas).

Crumble

Foto: Marijuana Meds Store

Por ejemplo, se les llama sugar crumble a los concentrados con texturas cristalinas en sus superficie. Al tacto, pareciera desmoronarse, de ahí su nombre en inglés (crumble=desmoronar).

Por otro lado, el budder (mantequilla en inglés) es más “cremoso, complicada de manejar pues se escurre constantemente. Su contenido en thc puede ser menor al shatter, pero esto se debe a que contiene más terpenos. Gracias a esto su sabor es más complejo y placentero al paladar.

Foto: Wired

¿Significa esto que el shatter es mejor por tener más THC? No necesariamente, recordemos que el efecto completo de la planta se produce gracias a la conjunción de todos sus componentes ya la forma que interactúan entre sí dentro de nuestro cuerpo (el llamado efecto séquito). Es gracias a los terpenos que ocurre toda la variabilidad de efectos, así que sin duda tiene su mérito su presencia en nuestros concentrados de cannabis.

El rosin

Foto: Terpenes and Testing Magazine

Este concentrado es el favorito de aquellos que prefieren consumir productos sin sustancias ajenas a la planta. Para obtener rosin se necesita aplicar una gran cantidad de presión y calor a un cogollo, sobras del trim o hachís. También se puede exprimir keif. Al igual que el budder, el rosin es capaz de preservar sabores muy diversos y complejos.

Extracción con CO2

Foto: marijuanaretailreport.com

Volviendo a los productos con solventes, otro de los más usados es el CO2 o dióxido de carbono. Así es, este gas de efecto invernadero es uno de los más utilizados en la industria de los concentrados. El proceso es una “extracción supercrítica” lo que significa que el material vegetal se expone a muy bajas temperaturas y alta presión. 

Así, los fluidos son capaces de romper las estructuras sin dañar las moléculas. Los resultados suelen ser de una muy alta precisión. Por ello es de los favoritos para la industria farmaceútica o medicinal, pues les permite escoger cannabinoides y terpenos al gusto.

Extracción con Etanol

Foto: Extraction by IchiBanCrafter

Las extracciones con etanol o alcohol etílico ofrecen cierta versatilidad en su proceso, particularmente en el manejo de las temperaturas. La forma más común de este tipo de concentrado es el RSO o rick simpson oil, el cual consiste en una simple maceración del material vegetal sumergido en alcohol.

Después de separar el material vegetal del alcohol, sólo hay que esperar a que este se evapore. Se puede aplicar calor a bajas temperaturas en un baño maría para acelerar el proceso, pero hay que ser cuidadoso pues el exceso de temperatura puede dañar los cannabinoides. También es el tipo de extracción más usada para las plumillas vaporizadoras.

Cristales de THC

Foto: Leafy

Por último, está tal vez uno de los concentrados más exóticos: los cristales de THC. Estos conservan en su forma pura al tetrahidrocannabinol, el principal componente psicoactivo del cannabis. Su proceso de extracción es complicado y delicado, en muchos casos se usa el CO2 supercrítico.

Lo que muchos desconocen de estos cristales, es que consumirlos por sí solos difícilmente te pone pacheco. ¿Recuerdas el efecto séquito y la importancia de los terpenos? Bueno, aquí se remarca su valor, pues la mejor forma de disfrutar los cristales es combinarlo con una salsa de terpenos. Eso sin duda te pondrá a volar.

Con información de:

https://www.youtube.com/watch?v=zbAY763zt4M

https://www.leafly.com/news/cannabis-101/what-are-co2-marijuana-concentrates

https://yodabbadabba.com/dabbing-resources/ethanol-extraction-cannabis/