La asociación civil Casa de la Medicina obtuvo ya el amparo para que a dos de sus integrantes se les autorice el cultivo de cannabis con fines personales. Rafael Prado, asesor jurídico de la asociación, nos compartió algunos de los pormenores de este proceso, los cuales conviene conocer para quienes pretendan emprender este camino: entre ellos la adquisición de semilla y la posibilidad de cultivar en colectivo.

La asociación celebró sus primeras autorizaciones con un taller informativo de cannabis.

Ampararte es sólo un paso

El amparo es sólo una parte del proceso. Recordemos que primero se debe acudir ante la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) para solicitar el permiso de autoconsumo de cannabis, lo cual se responderá con una negativa.

De acuerdo a Rafael Prado, el amparo es una forma en que la autoridad te protege y obliga a la COFEPRIS a entregar la autorización sanitaria para materializar el autoconsumo. “Pero si no cumples con la sentencia en tiempos y momentos debidos tu trámite nunca pasará”.

Uno de estos procesos es la adquisición de semilla. De acuerdo a Victor Daniel Gutierrez Muñoz, de México Unido contra la Delincuencia, todos los amparos establecen la obligación del Estado para entregar la semilla (con excepción del primero que fue otorgado en 2015). ”Lo interesante es que unos dicen que quien te tiene que entregar la semilla es la secretaría de salud y otros dicen que COFEPRIS. Los dos tienen la capacidad para hacerlo,”, explica Gutiérrez Muñoz.

Él también compartió que países como España sí tiene el sistema jurídico para exportar semillas. Estas provienen de bancos donde manejan genéticas estandarizadas y semillas feminizadas.

Mientras, Rafael Prado comparte que COFEPRIS les ha solicitado la cantidad de semillas necesarias para su autoconsumo y de dónde las vas a traer.

¿Y si cultivo con cualquier coquito?

Rafael Prado asegura que, a pesar de ser un trámite administrativo riguroso, estos requisitos son menos complicados que los Lineamientos que regulan los productos con CBD y el cultivo con fines de investigación medicinal.  

Aún así, es posible que no todos tengan la paciencia de importar una semilla cuando los “coquitos” abundan ya en el país y en las bolsillas de los pachecos. Entonces, ¿qué pasa si cultivas con una semilla ilegal?

Prado apunta al absurdo que esto implica: “Si estoy pidiendo un permiso porque soy usuario significa que ya estoy materializando mi consumo de alguna otra forma… la línea que hemos manejado es que a partir de nuestras posibilidades hemos implementado el autocultivo”.

Mientras, Gutierrez Muñoz admite que si bien sí es un acto ilegal, “no veo cómo el Estado puede comprobar eso”.

¿Será posible constituir clubes de cultivo entre amparados?

La creación de clubes de cultivo es una expectativa sobre la cual aún no quedan muy claro las posibilidades reales. En primer lugar, Gutierrez Muñoz desaconseja por completo esta práctica: ” el concepto que creó la Suprema Corte, el autoconsumo es: yo cultivo, yo cosecho, yo consumo.”

El riesgo, según él, es que en dado momento se necesitará aportar dinero para mantener el cultivo. “El que interfieran cuestiones monetarias no es la intención de la jurisprudencia”.

Sin embargo, Rafael Prado es un poco más optimista. “A partir de este momento la autoridad tendrá una injerencia muy relativa sobre lo que significa el autoconsumo de cannabis” aclara, en particular “respecto al cultivo”. “El hecho de que tú puedas realizar el acto de manera privada no significa que puedas, por ejemplo, dársela a tu amigo”.

“Yo creo que el autocultivo colectivo es viable siempre y cuando las personas que formen parte de él estén autorizadas. Tenemos la intención de que la asociación de autoconsumo a la que representamos sea cada vez más grande y con más personas”.

Sobre la cuestión monetaria expresa que “la idea es: yo tengo mi planta y me hago cargo de los gastos que conlleva materializar mi autoconsumo”. En ese sentido, cualquier cantidad de dinero que se llegue a requerir no será destinado a una compra, sino al cuidado de las plantas propias.

Ello, en caso de que “entregue” la planta. “Si decido tener la planta en mi casa lo que recibo del club es la asesoría necesaria para llevar mi cultivo. Esa es la idea del Centro de Salud que tenemos previsto”.

“No te voy a dar dinero para que me vendas, voy a aportar para cuidar el cultivo. O si me parecen altos los gastos voy y contribuyo a poder, regar, etc.”


Pueden contactar con la asociación a través de su página de facebook.