El pasado 20 de abril la comunidad cannábica se reunió en las profundidades del Estado de México para celebrar por séptimo año la fiesta de la marihuana. Organizado por River Co., los asistentes pudieron degustar rosin, algunos comestibles y flores de la casa.
Para el bajón se ofrecían garnachas y botana a un precio módico, lo que mantuvo satisfechos a los marihuanos quienes son reconocidos por su tragoneria insaciable.
Luego estuvieron los concursos en sus distintas categorías, los cuales motivaron a la gente a forjar los porros más veloces en Ponchado Veloz; a darse el mayor gusto de la comida en El Rey del Munchies; y a probar sus pulmones de acero en One Gram Dab.
El cannabis incluso se coló a las bebidas, pues hubo quienes ofrecían pruebas de pulque y raspados con sabor a marihuana.
Así, la comunidad cannábica extiende sus brazos hacia nuevos rincones de la República Mexicana.