Tal vez los humos se nos están subiendo muy pronto, pero la legalización de la marihuana en México nunca se había sentido tan cerca. Y es que una posible industria del cannabis tiene tantas vertientes y posibilidades, que basta con los primeros jalones de un gallo para imaginar lo que deparan las posibilidades del futuro.
Por ello, hoy escribimos cinco razones por las que México sería una potencia mundial en la creciente industria del cannabis.
Sol, playa y marihuana: nuestros destinos turísticos
Ya lo sugería el actual Secretario de Turismo, aunque con la idea de “reducir los niveles de violencia”. Nosotros pensamos que si ya contamos con destinos turísticos impresionantes, el darles un toque de cannabis los daría otro nivel de magia. Desde las posibles nuevas artesanías hechas con cáñamo, hasta el aprovechamiento de actividades lúdicas que incluyan flores de marihuana.
Recordemos que el “turismo pacheco” es algo que ya sucede en lugares como Colorado, Estados Unidos, donde a los visitantes se les dan recorridos por dispensarios y cultivos de cannabis. Con la diversidad de destinos, México tiene todo para sobresalir en este ámbito.
Y, después de todo, ¿hay algo mejor que fumarse un gallo gordo sobre la arena de la playa?
Flores, de todos los colores y sabores: nuestra biodiversidad
Como lo explicó la gente de Santa Rosa Green Seeds (leer más), las plantas adquieren sus características de acuerdo al lugar donde crecen por varias generaciones. Pues, además de ser afectados por cuestiones como la altitud, humedad, horas de luz, y tipo de tierra, aprenden a evolucionar con otras plantas.
Es por eso que algunos adquirieron los sabores y aromas del mango, limón, pimienta negra, u otros vegetales.
La ventaja de México es su diversidad de climas y especies, los cuales contribuyen al desarrollo de plantas de marihuana con todo tipo de sabores y efectos. Desde las zorrilludas del pacífico, las sativas de las sierras altas, pasando por las que crecen en periférico. El potencial que se nos presenta es enorme.
Xochimilco
Aunque ya hablamos de posibles destinos turísticos, Xochimilco merece su lugar aparte. No sólo es un lugar para visitar, emborracharse y hacer uno que otro ridículo. También es uno de los stios con mayor tradición prehispánica. Además que las chinampas ofrecen una de las mejores formas de cultivo: la hidroponía.
Los mexicas eran conscientes de eso, y explotaron al máximo la alta eficacia y rendimiento de esta técnica.
Desafortunadamente, hoy Xochimilco se enfrenta a todo tipo de problemas ambientales, por los que nos conviene cuidar mejor este patrimonio cultural.
Comida tradicional mexicana… con mota: el potencial culinario.
Uno de los mayores atractivos y orgullos nacionales es la calidad y diversidad de oferta culinaria disponible. Y desde el principio de los tiempos uno de los mejores aliados de la comida es la marihuana. Ya sea para darte un bajón y experimentar los sabores de una forma totalmente diferente; o usar el cannabis como un ingrediente más.
De cualquier forma, todo es posible. Desde los orgullos universales como el pozole, hasta las delicias regionales como las quesadillas sin queso. Junto al potencial culinario de la marihuana que recién comienza a explorarse, uno sólo puede salivar al imaginarse un tamal cannábico, un pozole acompañado de hojas crudas, o la posibilidad de un shot cannábico (escarchado con flores descarboxiladas o crudas).
Los mexicanos somos excelentes marihuanos.
Una de las experiencias por las que se reconoce a México desde el turismo internacional es la calidez de su gente. Por lo que puedo asegurar que la pachequez mexicana también es una de las más acogedoras.
Después de todo, los puntos de arriba son sólo un pretexto para destacar lo que ya somos y lo que tenemos para ofrecer. La marihuana, como sustancia y planta sagrada, sólo enaltece la experiencia y el placer. Y en cierta forma ya somos una potencia del cannabis, en parte por las redes criminales (desafortunadamente), pero también por la sinergia natural.