A causa de la emergencia sanitaria decretada por la llegada del COVID-19 a México, diversos gobiernos han tomado la decisión de, de alguna u otra manera restringir la venta de alcohol. ¿Qué efectos tendrá este escenario de mini-prohibición en una sociedad cuya relación con la sustancia es bastante delicada? 

La Dosis entrevistó a Emma Rodríguez Romero, fundadora y miembro de Latinoamérica por una Política Sensata de Drogas y experta en el tema para clarificar la situación.

“La situación del alcohol y el Covid no es propiamente sólo de México. Hay un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) llamado “Alcohol y COVID-19” y habla de los riesgos que tiene el uso de esta sustancia durante la pandemia (debilita el sistema inmune, ha habido mayor consumo, etc). Tan sólo en Irán hubo 700 personas intoxicadas por la creencia de que el alcohol ayudaba a matar el virus”, señala Emma Rodriguez.

“El alcohol etílico (etanol) es la sustancia en las bebidas alcohólicas que es responsable por la mayoría de los daños que surgen de su consumo, sin importar si es consumida en la forma de vino, cerveza, o de cualquier otra forma” se lee en el informe publicado por la OMS. “De acuerdo con reportes de los medios y fuentes anecdóticas, las muertes relacionadas a la ingesta de productos alcohólicos, basadas en la idea falsa de que de alguna forma ofrecerá protección contra el virus, han ocurrido en algunos países durante la pandemia del COVID-19”. 

Ante ello, los diferentes países ha tomado diversas medidas, por ejemplo “Panamá tiene una ley seca actualmente. Se está viendo que sí, hay una situación de incremento en el tráfico de alcohol. No es exclusivo de México”, apuntó Emma .

En el país, 21 estados han reportado algún tipo de medida que restringe la venta de alcohol. Cuatro gobernantes la han aprobado y 52 municipios la han implementado reporta el sitio Infobae México. Y en la Ciudad de México son nueve las alcaldías que han suspendido en alguna forma las actividades de venta de alcohol, ya sea en su totalidad o parcialmente, limitando ésta a ciertas horas.

Imagen: Infobae

“En teoría estas medidas son para ayudar a la salud pública” continúa. “Y también para aminorar la violencia familiar. Hay un número elevado de violencia que se ha registrado en los hogares, sobretodo hacia las mujeres. Se supone que esto ayuda a disminuir y salvaguardar la paz de la ciudadanía. Sin embargo, es una medida un tanto peligrosa como lo hemos estado viendo. ”

Y es que en México el alcohol representa un problema grave. Según la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco en su última actualización (2016 - 2017) entre los años 2002 y 2001 la prevalencia de consumo de esta droga al menos una vez en la vida incrementó del 64.9% al 71.3%. 

¿Qué se puede esperar en un escenario como el de hoy en día?

“El uso de alcohol en México subió bastante” confirma Emma y usa datos de la consultora Nielsen. “Se registró del 5 al 11 de abril un crecimiento del 66% respecto del año pasado. Más de la mitad subió el uso de alcohol. También, en México no existe educación sobre el consumo de ciertas sustancias, entre ellas esta bebida etílica. Sí hay riesgos en la pandemia, sobretodo en temas de violencia intrafamiliar, y seguramente ha habido congestiones alcohólicas durante este aislamiento”.

“¿Se deberían tomar medidas? Sí, pero no prohibicionistas tajantes, sino más preventivas. Como sacar anuncios de evitar el exceso, no consumir más de lo que el cuerpo aguanta, etc. Reducción de riesgos y daños, porque hay una crisis social y justo eso abre el tema de la salud mental. El tema de la salud mental es un tema tabú y las personas ingieren alcohol porque no saben qué hacer con la ansiedad que genera el aislamiento. Son muchos factores”. 

El pasado 30 de abril en Guadalajara murieron 21 personas por consumir alcohol adulterado, mientras otras 44 han sido hospitalizadas y siete fueron dadas de alta, reporta El Universal. Los ayuntamientos locales reportaron el decomiso hasta 700 litros de la sustancia.

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“Las consecuencias las vimos cuando murieron personas en Jalisco por consumir alcohol adulterado. Esto así comienza, ya subieron los precios de la cerveza, y pues van a comenzar a haber adulteraciones” sentencia Emma. 

Este escenario de prohibición representa también un cambio en las dinámicas de venta y distribución, ¿veremos pronto a dealers de alcohol? ¿seremos extorsionados con la cheve así como con el porro?

“Respecto a las extorsiones, no sé” clarifica Emma “aún no estamos como Panamá donde están haciendo incautaciones y deteniendo personas. Acá aún no. No creo que vaya a subir a una medida tan drástica porque si bien es un ejercicio de prueba y error por parte del gobierno, también es importante considerar que una cosa es la Ciudad de México (la gran burbuja de nuestro país y otra cosa lo que pasa en otros estados).” 

“Es interesante las dinámicas de uso de las sustancias en las diferentes regiones del país” continúa Emma. “No es lo mismo el Norte, que el Sur, que el Centro. Eso también hay que tomarlo en cuenta y ver qué pasa”.

Sobre cambios específicos a las dinámicas del mercado, Emma apunta que “Más que 'dealers' de alcohol comenzarán a surgir redes de distribución clandestina y los precios de van a disparar. No sé cuánto tiempo vaya a suceder esto, porque las autoridades van a comienza a actuar y tomar esto en cuenta que se está pasando por alto, no se pensó que las personas tuvieran tanto estrés por no consumirlo, y tanto que llegaron a ese extraño de consumir adulterado. Pero también te habla de cómo se encuentra el país respecto al uso de esta sustancia.” 

Por último, Emma comenta que “cabe señalar que esta medida no es nueva” y refiere a la gran prohibición del alcohol en Estados Unidos en la década de los 20. “Durante esa época era la Mafia quien hacía clandestinamente y lo distribuía.”

“En ese entonces los gringos cruzaban la frontera hacia tijuana, donde podían conseguir no sólo alcohol sino también sexo y drogas. Esos son los riesgos que tiene una prohibición tan tajante y más aún en una pandemia como la de ahora con un estrés tremendo. Pero también, los riesgos que tiene el uso de alcohol también es importante señalarlos. Hay que tener un equilibrio”.