El porro es una parte esencial en la vida de la mayoría de los marihuanos. Sin duda es la forma predilecta de muchos para consumir cannabis. Tan importante es que, al día de hoy, todas las catas y copas cannábicas utilizan el canuto como “medida estándar” para las deliberaciones.
Dicho lo anterior, investigaciones de los últimos años han revelado que tal vez no sea la manera más eficiente para aprovechar nuestros valiosos cogollos.
Porros vs Vaporizadores
Primero supimos que, en comparación con el proceso de vaporización, la combustión destruye el 50% de los cannabinoides. Esta desventaja también incluye a las pipas, bongs y blunts.
Fue entonces que muchos volteamos a los vaporizadores, pues su rendimiento es hasta 10 veces mayor, además de evitar las toxinas resultado de la combustión (algunas de las cuales provecan severos problemas de salud al largo plazo.)
Ahora, un nuevo contendiente sube a disputar por la forma más eficiente para consumir cannabis: el dab. En pocas palabras, un dab es la vaporización de concentrados de marihuana, coloquialmente conocido como wax (cera).
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Porros vs dabs.
El dab hace un mejor trabajo en llevar el total de cannabinoides disponible a los pulmones en comparación a fumar, encontró un estudio conducido por investigadores del Instituto de Medicina Forense, en la Universidad de Bern, Suiza.
Publicado en la revista Ciencia Forense Internacional, allí se asegura que los porros gastan hasta 300 veces más THC y CBD que los dabs.
Para el experimento utilizaron flores cuya concentración de THC rondaba el 17% (nada mal para un cogollo, pero lejos de ser la más alta posible). Mientras que el wax (BHO) alcanzó el 71% de concentración (bastante bajo para un extracto).
Los detalles del experimento.
En el mismo estudio, los investigadores señalan algunos “detalles” de sus pruebas. Por un lado, utilizaron wax confiscado por la policía, el cual estaba diluido con glicerina vegetal, una práctica en desuso actualmente. Hoy en día se opta por diluir el aceite con terpenos provenientes del cannabis u otras plantas.
También admitieron que para su método de “dabeo” utilizaron temperaturas altas, con lo que tal vez ellos mismos causaron algo de combustión, lo cual afectaría en parte los resultados. Lo recomendable es usar tempreaturas bajas para no lastimar la garganta y apreciar mejor el sabor del extracto.
Por otro lado, y a diferencia de otros experimentos similares, esta vez se deshicieron del factor humano. En vez de juntar a un montón de pachecos a una tarde de ciencia y munchies, construyeron un par de pulmones artificiales.
Al eliminar la percepción humana (subjetiva e imprecisa) se esperan resultados más replicables y medibles, pero no necesariamente fieles a la realidad en cuanto a la experiencia del usuario se refiere. Recordemos que el sistema endocannabinoide es complejo y apenas lo comenzamos a entender y estudiar.
Después de todo la frase “nada pone como un porro” es verdad para muchos de los marihuanos. Tampoco somos maquinas, nuestros fines no deberían ser siempre la eficiencia o eficacia. Sino el ejercicio de nuestros derechos sin afectar a terceros. Si para ello escoges una pipa, un blunt, o hasta una tapa de pluma, no tendremos más que desearte buenos humos
Con información de:
https://hightimes.com/dabs/new-study-shows-joints-waste-300-percent-more-thc-than-dabs
https://www.leafly.com/news/health/vaping-vs-smoking-marijuana-safety