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Cada día se incrementa la popularidad del uso de psicodélicos, como la psilocibina presente en ciertas especies de hongos, para tratar enfermedades mentales y otro tipo de padecimientos de la mente. Un estudio publicado este año encontró importantes hallazgos sobre el mecanismo de esta sustancia en particular y cómo altera el funcionamiento del cerebro de manera positiva.

La investigación publicada en la revista Reporte Científico sugiere que una única dosis de psilocibina puede incrementar la plasticidad emocional y en el cerebro, lo cual soporta la hipótesis de que es posible enfrentar el problema del efecto negativo con esta sustancia. Eso quiere decir que se observó una reducción en las medidas de estrés, sentimientos negativos, ansiedad, tensión, depresión y perturbaciones del humor una semana tras el uso de psilocibina. Por otro lado, se vio un aumento del ‘afecto positivo’.

Para la investigación 12 voluntarios saludables tomaron una única dosis de psilocibina. Esta era de 25 miligramos por cada 70 kg de peso corporal. Después se les aplicó una serie de preguntas estandarizadas y otras evaluaciones. Así se midieron distintos aspectos de su estado mental, emocional y de humor las cuales componen el afecto. 

Un mes después del uso de psilocibina se les volvió a aplicar la prueba para medir y comparar el afecto en el paso del tiempo. Los voluntarios también se sometieron a una prueba de resonancia magnética (fMRI) para observar la conectividad cerebral.

Como se mencionó, uno de los principales resultados fue el aumento del afecto positivo y reducción del aspecto negativo. Este cambió persistió el paso del tiempo y se observó también durante la segunda prueba

El afecto negativo está relacionado con problemas como la depresión o las adicciones. “”El afecto negativo es un componente clave del ciclo de adicción en que el anhelo y abstinencia experimentados después de la intoxicación llevan a la preocupación, anticipación y re-administración del abuso de drogas” señala el texto.

Según otras investigaciones, es posible que la psilocibina desencadene un proceso de “neuroplasticidad” que pueda permanecer por semanas.

En pocas palabras, la neuroplasticidad consiste en la capacidad de tu cerebro para formar conexiones neuronales distintas a las que ya usa. Esta es una habilidad que permite a un individuo adaptarse a su entorno. Los investigadores sugieren que este proceso permite a los individuos el incremento del afecto positivo.

“Las drogas psicodélicas han mostrado la reducción aguda del procesamiento del estímulo afectivo negativo, lo cual aumentó el humor positivo en humanos. En el paradigma de comportamiento, los psicodélicos han mostrado reducir la sensibilidad durante la codificación de rostros negativos, el reconocimiento de expresiones faciales negativas y respuesta al estímulo negativo”. 

Y sí los resultados son duraderos y persistentes aún terminados otros efectos psicoactivos de la sustancia, como lo sugiere el estudio, sería posible “revelar un mecanismo transdiagnóstico de los efectos terapeúticos persistentes de los psicodélicos”: