Conforme se avecina el otoño y las horas de luz se acortan, comienza una de las etapas de cultivo más importantes: la floración. Es en este periodo que nuestras plantas dedicarán su energía al desarrollo de las flores. Las decisiones que se tomen en este momento serán cruciales para determinar el potencial. Por ello, enlistamos a continuación algunos factores a considerar.
Determinar sexo
En primera, este es el momento para determinar el sexo de las plantas. Esto, en el caso de que las semillas utilizadas no hayan sido feminizadas. Así podrás retirar los machos que se presenten y evitar la polinización, pues la producción de semillas (coquitos) afecta el rendimiento de los cogollos.
Esto, porque en lugar de que la planta se enfoque en nutrir sus flores, busca completar su ciclo reproductivo de forma eficiente.
Nutrientes especiales
Hay quienes continúan utilizando los fertilizantes de vegetación durante la primer semana, ésto porque la planta aún puede dar su “último estirón”. Por ello, los nutrientes y fertilizantes especiales para esta etapa suelen aplicarse a partir de la segunda semana.
Estos son ricos en potasio y fósforo, elementos esenciales para el crecimiento de las flores. Para optimizar la absorción de estos nutrientes, conviene mantener el agua en niveles de PH entre 5.5 y 6.6.
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Algunas fuentes naturales de nitrógeno y fósforo son humus de lombriz, guano de aves marinas, la harina de huesos y la ceniza de madera.
Deficiencia y sobrefertilización
A partir de la segunda semana aparecerá los primeros pistilos, que en el futuro se convertirán en cogollos. Es a partir de este momento cuando se debe ser extra cuidadoso y precavido. Por un lado, proporcionar la cantidad de nutrientes necesaria. Pero también cuidar el no sobrefertilizar, pues la saturación de ciertos elementos es igual de perjudicial.
Algunos indicadores de estas deficiencias o sobrefertilización son hojas decoloradas, amarillentas o quemadas de las puntas.
Los cogollos
La aparición de cogollos implica varias cosas. En primer lugar, el volumen y densidad de nuestras plantas aumentará de forma considerable, lo cual debe contemplarse al momento de adecuar el espacio del cultivo.
Pero también hay que considerar el olor. Pues, si todo va de acuerdo al plan, tus flores pronto comenzarán a expedir el característico y penetrante olor a marihuana. Esto no implica un problema en sí, hasta que tu vecino o vecina se percata y da aviso a las autoridades. Lo cual se soluciona con un extractor de aire conectado a un filtro de carbono.
Tricomas.
Si los cogollos son la joya de la corona, los tricomas son el brillo de las “piedras preciosas”. Es en ellos donde se concentra el THC, y un buen indicador del progreso de nuestras flores. En particular hay que observar la transición de color blanco a uno marrón oscuro o ámbar. Este cambio significa que pronto será momento de cosechar.
Una semana antes de la cosecha deben retirarse todos los nutrientes, fertilizantes y llevarse a cabo un lavado de razí. Así, mejoraremos tanto su sabor o aroma.
Con información de Royal Queen Seeds