Psicólogo – Comunidad Cannábica Colombiana
@CCCMedellin

#LegalicelaUstedMismo

Colombia es un país con una larga historia de guerras internas. La más larga de ellas, de 52 años, parece llegar a su final: la guerra con las FARC. El lunes 26 de Septiembre en la ciudad de Cartagena, las FARC y el Gobierno Colombiano firmaron un acuerdo por la paz que, aunque votado en contra en el plebiscito del 2 de octubre, puede llevar a una política diferente en el campo de las drogas ilícitas.

Uno de los “motores” de esta guerra ha sido la droga (especialmente la cocaína, la marihuana y, en menor medida, la heroína) y su tráfico nacional e internacional. Inició cuando se comenzó a cobrar el denominado “impuesto al gramaje” a los productores de pasta base de coca, continuó al cobrar por seguridad a cultivos y laboratorios, y después al establecer cultivos y laboratorios propios, hasta convertirse, según algunos analistas, en el 3er “cartel” más grande del mundo.

Es por esto que en las negociaciones ente el Estado Colombiano y las FARC hubo un punto exclusivo para tratar el tema de las drogas: “Solución al problema de las drogas ilícitas en Colombia”. El cual, en esencia, busca desvincular a las FARC de los negocios ilícitos relacionados con drogas y comenzar un nuevo abordaje del tema. El acuerdo al que se llegó tiene 3 pilares: cultivo, consumo y narcotráfico.

En lo relacionado con el cultivo, se busca sustituirlos por productos legales, esto de la mano del punto 1 de los acuerdos: “la reforma rural integral”. Se busca no sólo cambiar el cultivo, sino que se lleve a cabo todo lo necesario para el desarrollo agrario: educación, salud, empleo, vías de comercialización y asistencia técnica, para evitar que se continúen los cultivos ilícitos por falta de oportunidades y recursos. Y se contempla un plan de atención para reducir los efectos que en principio puede ocasionar ese periodo de transición de los cultivos ilícitos a los lícitos.

En este punto también encontramos el reconocimiento de los usos ancestrales y alternativos de las plantas: coca, marihuana y amapola; lo cual abre una puerta al uso medicinal, industrial, espiritual y, por qué no, recreativo de estas plantas.

En lo relacionado con el tema del consumo, se reconoce que Colombia ha pasado de ser un país netamente productor a uno altamente consumidor, por lo que el acuerdo busca dar un nuevo trato a la población usuaria de drogas y generar nuevos planes de prevención, mitigación y sustitución. Se busca que las autoridades departamentales y municipales participen en la implementación de programas con el fin de disminuir los daños generados por el consumo de drogas.

Aunque Colombia en este tema ya ha dado pasos importantes, como la reglamentación de la dosis personal (Ley 30 de 1986 y su reglamentación en la Sentencia C – 221 de 1994), la realidad para el usuario es aún de criminalización, expresada en el rechazo social y el abuso de poder de la policía. Esperamos que tomen en cuenta que no todo usuario es adicto y que el enfoque no sólo se base en salud pública, sino también en el respeto de los derechos humanos.

En lo que respecta al “narcotráfico”, se busca intensificar la lucha contra el “crimen organizado”, por lo que se acordó atacar a los eslabones más fuertes del narcotráfico, perseguir el lavado de activos, la producción y tráfico de precursores, y la corrupción. Se reconoce la alta rentabilidad del “narcotráfico”, por lo que se espera que otras organizaciones delincuenciales busquen apoderarse de los negocios que dejará la guerrilla; por esto no sólo se plantea sustituir los cultivos, sino fortalecer la lucha contra los delitos relacionados.

Ahora habrá que esperar a ver qué sucede por el voto contra el acuerdo de poco más de la mitad de los colombianos. Pero estamos seguros que la PAZ en Colombia no se logra con la firma de un papel, sino que la CONSTRUIMOS día a día con las acciones de todos los miembros de la comunidad. La PAZ es un CAMINO más que una Meta. Y la Comunidad Cannábica Colombiana invita a TODO EL MUNDO, a construir la PAZ día a día. UN MUNDO MEJOR SI ES POSIBLE.

DAVID PONCE PATIÑO

Psicólogo – Comunidad Cannábica Colombiana
@CCCMedellin

#LegalicelaUstedMismo