Marian Erbach, dueño del Germaican-Hostel, en Jamaica, implementó un plan infalible para limpiar la playa.
Este consistió en intercambiar un porro por cada bote lleno de basura que fuese recogida de la playa. '1 free spliff for a full bucket trash', decía la cartulina.
La propuesta fue exitosa y atrajo a vecinos y turistas, incluso hasta hubo quienes ayudaron a limpiar las playas, aun cuando decían no querer fumar marihuana.
La única limitante de Erbach es la ley, la cual establece como máximo de portación legal 56 gramos de mariguana (2 onzas). Cantidad con la que armó 50 “spliffs” para intercambiar por el trabajo de juntar la basura.
En información de ContraRéplica, el empresario señala que "Estaba totalmente molesto con toda la basura que nos rodeaba, así que en los últimos meses hice mucha investigación sobre el plástico y veía algunas fotos donde la gente ofrecía café gratis por un balde de basura. De allí surgió todo”, detalló.