El Día Mundial por la Liberación de la Marihuana es una celebración internacional que se celebra cada año en múltiples ciudades alrededor del mundo el primer sábado de mayo. Platicamos con Leopoldo Rivera Rivera, miembro de la Asociación Mexicana de Estidios sobre Cannabis (AMECA) e iniciador de estas convocatorias.

Si aún estás indeciso sobre asistir o no a uno de los eventos cannábicos más importantes del año presta atención a los siguientes puntos.

Por primera vez se llegará al Zócalo

Las marchas como forma de protesta tienen por objetivo retomar el espacio público y visibilizar las exigencias de la sociedad. En este sentido, los monumentos y sitios públicos son fundamentales pues contribuyen a generar cierto sentido de pertenencia con las demandas que ahí se hacen.

A lo largo de sus años, la Marcha de la Marihuana ha partido desde varios puntos: Parque México, el Palacio de Bellas Artes y la Alameda Central.  “La Alameda es el espacio público por excelencia. Es ideal porque cabe mucha gente y el número de asistentes va en aumento” comentó Leopoldo Rivera.

Los puntos de llegada han sido: el Monumento de la Revolución, el Monumento a la Madre y el Ángel de la Independencia. Este año, el contingente de pachecos llegará al Zócalo, donde llenará la plaza de la constitución de humos y buenas vibras. “También pasaremos frente a la Suprema Corte de Justicia en reconocimiento a los jueces y su independencia” aseguró Polo en referencia a la jurisprudencia creada a partir del quinto amparo el año pasado. “Gracias a ellos hay finalmente una presión real hacia el legislativo para que regulen el cultivo y consumo de marihuana con fines personales dentro del libre desarrollo de la personalidad”.

Hacer presencia marihuana

La importancia de salir a la calle es encontrarnos con el resto de la sociedad. “Es una visibilización digna, una salida del closet masiva. Una toma de postura política al decir: aquí estamos los usuarios, dando la cara. Nosotros no somos el problema en el tema de drogas, queremos un marco legal e incluso estamos dispuestos a pagar impuestos” apuntó Polo.

En este tiempo la asistencia de personas ha crecido no sólo en números, sino en la variedad de las personas que hacen de este un encuentro bastante nutrido. “No solo van consumidores, sino pacientes y familias enteras también. Siempre ha asistido una muestra representativa de la sociedad, no solo hippies o rastas. Desde los fifís hasta los indigentes van. Es una marcha que saca a la calle a personas que normalmente no se interesarían en un movimiento político” comentó Rivera.

También enfatizó la importancia de mostrarnos en calidad de ciudadanos luchando por los derechos de todos. “Creo que el gran logro de la marcha es hacer ver que los usuarios de cannabis y de otras sustancias tenemos los mismos derechos que cualquier otra persona".

El mensaje que se pretende dar es: “Nosotros somos pacíficos, propositivos, festivos. No insultamos, no estamos enojados. No somos broncudos, podemos convivir perfectamente con la sociedad”.

Las señales de humo como forma de protesta

Debido a la persecusión policiaca y constante criminalización, los consumidores de marihuana estamos obligados a escondernos. La marcha es una oportunidad para usar el espacio público en ejercicio de nuestros derechos y se aprovecha la ocasión para rolar libremente el gallo.

Sin embargo, Leopoldo Rivera enfatizó que el llamado a la gente nunca ha sido para consumir. “La convocatoria nunca ha sido a fumar ni a consumir, sino a ejercer los derechos civiles (hacer demandas públicas, libre expresión, libre reunión, libre tránsito). La constitución garantiza el derecho de los ciudadanos a cambiar una ley que se considera injusta.

“Pero si la gente considera que fumar es una forma de protesta no vamos a ser quienes los reprimamos. Desde la segunda marcha la gente comenzó a consumir masivamente. Nos alarmaba y pensamos que nos iba a agarrar a todos.”

Aclaró que en ningún momento se pide ningún tipo de permiso para consumir, pues ninguna autoridad te puede entregar ello por escrito.  “Pero con 10 mil asistentes es difícil que nos lleven a todos. Es más un acuerdo tácito de tolerancia donde cada quien se hace responsable de su consumo.

Caber recordar la recomendación de no portar más de 5 gramos de flor.

Una protesta festiva

A diferencia de otro tipo de marchas donde la inconformidad y enojo social está a flor de piel, la Marcha por la Marihuana tiene un carácter más festivo y fraternal. Sin embargo, no por ello se pierde la calidad de las demandas.

Este año, algunas en concreto son terminar con las detenciones arbitrarias y la extorsión policiaca. “Son demandas serias y urgentes de cumplir. Las mismas consignas son festivas, pero no por eso sus reclamos menos válidos”.

Por ejemplo, la frase La ley tiene un hueco, derechos al pacheco alude a la extorsión policiaca y que a pesar de la reforma a la Ley de Narcomenudeo, la cual tenía por objetivo distinguir consumidores de criminales, en la práctica no se nos reconoce ningún derecho.

El próxima año ¿marcharemos bajo un marco legal?

No se puede cantar victoria antes de tiempo, pero es posible que esta sea la última marcha organizada bajo el umbral de la prohibición absoluta de la marihuana. Ante esto panorama cabe preguntarnos ¿qué será de la marcha una vez se tengan reconocidos nuestros derechos?

“Una vez legal, la marcha se transformará en un punto de encuentro entre los distintos cultivadores y consumidores. Llevaremos ya nuestras plantas y los diferentes proyectos. Eso es importante, reunirnos no solo para protestar sino para conocernos, organizarnos, producir diferentes. Si hay una ley justa habrá que celebrarlo” comparte Leopoldo Rivera

No fumo, pero me sumo.

Por último recuerda a los no consumidores que ellos también se verían beneficiados de la regulación de la marihuana. “Yo les digo la marcha es para que la ley nos beneficie a todos y no que nos perjudique a todos. Seas o no seas usuario, la prohibición te perjudica a ti también”.

Por ello, se invita tanto a consumidores como no consumidores a asistir el sábado 4 de Mayo a cualquiera de las 15 ciudades en territorio nacional donde se estará llevando a cabo este encuentro (además de la capital mexicana).