El DMT es una sustancia psicodélica clásica que, por su similitud con el neurotransmisor de la serotonina, genera efectos psicodélicos muy potentes. Se encuentra presente de forma natural en plantas conocidas como la ayahuasca, el yopo y la chacruna.
En el pasado estas plantas eran usadas con fines espirituales y místicos. Hoy en día la sustancia ha ganado popularidad por su potencial uso en terapias asistidas para tratar padecimientos de salud mental.
Ante el incremento de popularidad, hay quienes llaman a conservar en la medida de lo posible las especies vegetales de donde se obtienen y no sobre-explotarlas. Una alternativa sería sintetizar el DMT en un laboratorio para no depender de los recursos naturales.
¿Cómo sería posible? Aquí te contamos:
Historia
En 1931 se sintetizó por primera vez el DMT. Esto fue llevado a cabo por el químico canadiense Richard Helmuth Frederick Manske. Él hizo el DMT a partir de modificar la molécula de triptamina. A pesar de que describió la estructura química y sus propiedades, se pasó por desapercibido las propiedades psicoactivas.
Fue hasta que el químico Stephen Szara sintetizó 10 gramos de la molécula para experimentar en sí mismo y otros 30 voluntarios que se hicieron conocidos muchos de los efectos y fenómenos percibidos durante la experiencia, entre ellos el contacto con otras entidades.
¿Cómo se sintetiza el DMT?
La siguiente información se comparte con fines culturales. La Dosis no recomienda seguir este procedimiento ni consumir ninguna sustancia.
Esta ruta de síntesis para producir DMT es conocida como de “Speeter-Anthony” y se escribe con más detalle en el libro PIKHAL de Alexander Shulgin.
1: Reacción indol con cloruro de oxalilo
Primero, se agrega lentamente el cloruro de oxalilo altamente reactivo a una solución de indol y éter dietílico. Después se agita continuamente, el producto intermedio, cloruro de indol oxalilo, se precipita a medida que se forma en un sólido cristalino amarillo.
2: Reacción cloruro de indol oxalilo
Después, se disuelve dimetilamina en éter dietílico frío. Esto se hace reaccionar con cloruro de indol oxalilo para formar una amida llamada indol-3-il N, N-dimetilglioxilamida. Después se agita vigorosamente, la amida se precipita como un sólido blanco. Luego se debe filtrar, lavar con éter y agua y dejar secar.
3: Reducir la amida con Hidruro de litio y aluminio para formar la amina.
Tras ello, se agrega la amida sólida del paso anterior a una solución de hidruro de litio y aluminio (ALH) disuelto en tetrahidrofurano (THF). ALH reacciona con los grupos carbonilo de la amida, formando un ion iminio intermedio que se reduce a una amina terciaria.
4: Formar la sal y recristalizar el DMT
Por último, se disuelve el DMT impuro en éter de petróleo caliente, luego se enfría para formar los cristales de DMT. Los cristales se secan al aire para luego agregarles éter dietílico anhidro y cloruro de hidrógeno anhidro para formar la sal. El último paso es formar los cristales con metanol o benceno para formar clorhidrato de N, N-dimetiltriptamina.
Información adicional de benzinga.com