Un estudio publicado en la revista Drug And Alcohol Review descubrió que los individuos que fuman en solitario con más propensos a padecer de psicosis, dependencia y otros usos que podrían considerarse problemáticos. De igual forma, indica que quienes llevan un uso social tienen más probabilidades de combinar marihuana con alcohol.

La investigación, conducida por la Universidad de Dalhousie en Canadá, reunió a 188 personas consumidores de cannabis. Entonces se les aplicó un cuestionario sobre sus hábitos en torno al uso de marihuana.

En comparación con los individuos que reportaron un “uso social”, los consumidores solitarios fueron más propensos a “dar positivo” en un diagnóstico de psicosis. También mostraban más síntomas de una posible dependencia y “usar el cannabis para lidiar con situaciones” (término bastante ambiguo en realidad).

Por otro lado, los consumidores sociales reportaron con mayor frecuencia llevar un uso combinado con alcohol durante sus “sesiones” más recientes”.

De acuerdo con la investigación, “los resultados sugieren que el uso solitario puede estar asociado con motivos específicos para el consumo y sus futuras consecuencias adversas”.

Como siempre, se alienta a que los estudios e investigación continúen, pues se necesita más información para llegar a algo concluivo.

DOI del artículo: DOI: 10.1111/dar.12912