Puede que la planta de marihuana no sea originaria de México, pero la palabra “mariguana” sí, como pueden constatarlo algunos estudios léxicos. Sin embargo, aún no está del todo claro su origen, de tal forma que al día de hoy hay tres “formas correctas” de escribirla.

Sabemos fumarla pero, ¿sabes escribirla?

Marihuana con “H”

Recordemos que la planta llegó por primera vez a América junto con los conquistadores españoles, quienes usaban las fibras de cáñamo para múltiples propósitos industriales. Posteriormente, los pueblos originarios descubrieron sus propiedades psicoactivas y las comenzaron a aprovechar.

Es ahí donde algunos autores identifican un posible origen. Así, en nahuatle la palabra estaría compuesta por los vocablos malli, que significa “prisionero”, hua que significa “propiedad” y ana que quiere decir “coger, agarrar o asir”. Entonces, mallihuana sería una planta que se apodera del individuo. Y se escribiría con H.

Hay registros históricos que apoyan esta forma, cuya antigüedad data desde 1850. Fue el escritor Jorge García-Robles quien encontró un par de letreros de aquel entonces los cuales prohíben fumar “la hierba llamada marihuana".

También es así como se ve en obras populares como Don Chepito Marihuano (1890-1900) del artista mexicano José Guadalupe Posadas y el corrido La cucaracha, el cual narra algunos de los conflictos de la Revolución Mexicana:

"Pobrecito de Madero
casi todos le han fallado
Huerta el viejo bandolero
es un buey para el arado.


La cucaracha, la cucaracha
ya no puede caminar,
porque no tiene, porque le falta,
marihuana que fumar."

 

Desafortunadamente, el zar de las drogas estadounidense de aquel entonces, Harry Anslinger (1930-1937), aprovechó el término como parte de su campaña anti-hispanos (en aquel entonces, como hoy día, había un gran pavor hacia los migrantes). Incluso llegó a declarar que “me gustaría que el mundo conociera lo que un cigarro de marihuana provoca en nuestra corrompida y degenerada comunidad hispanohablante”.

Por ello se dice que, escrita con “h”, la palabra es racista y discriminatoria.

Marijuana con J

Sobre este uso, hay quienes lo explican desde los tiempos de la revolución. Por ejemplo, el médico y escritor Fernando A. Navarro ubica la raíz de esta palabra en los soldados combatientes y el uso que le daban a la planta, donde:  

“Si un “Juan” en México es cualquier soldado raso, Marijuana, la prostituta cuartelera y la soldadera o mujer que acompañaba a los en campaña”.

Sobretodo si pensamos que era frecuente para los combatientes el uso de la planta, pues les ayudaba a sobrellevar el estrés y presión del conflicto armado, uno de los más violentos de nuestro país.

Curiosamente, esta palabra fue deformada en los idiomas inglés y francés por las variantes Mary Jane y Marie-Jeanne, respectivamente.

Mariguana  con “g”

Por último está la forma escrita con G, de la cual no hay mucha información. E incluso la Real Academia de la lengua Española admite que “sólo se emplea en México y algunos países centroamericanos“ (y hasta el autocorrector intenta corregirme mientras escribo esto).

Sea como sea, no importa como la escribas, sino que le demos un uso adecuado y responsable. De todas formas, hay mil y un maneras de llamar a esta planta. Aquí algunas de ellas, ¿cuál usas tú?:

Chora o shora.
Cola de borrego,
De la buena/De la verde.
Doña Diabla.
Greña.
Grifa
Señora Viniegra (en referencia al doctor Leopoldo Salazar Viniegra)
María.
Mois
Mota
Petate quemado o del soldado.
Yesca.