Desperdiciar un extracto de marihuana no está chido. En especial cuando para obtener un producto de calidad debes gastar una considerable cantidad de dinero. Por ello les dejamos algunos consejos para aprovechar al máximo su wax, rosin, budder, o cual sea su concentrado favorito.

Calentar correctamente un dab

Las temperaturas son un factor clave en el aprovechamiento de los extractos, tal vez el más importante. Para el calentar un dab, conviene usar la punta de la flama interior del soplete, pues es la que mayor calor produce en menor tiempo. Además es en esta zona donde se liberan menos subproductos de la combustión. Las temperaturas ideales para dabear son entre 157 y 227 °C (osea, 315 y 440°F).

Cuando no tengas un termómetro láser disponible, lo mejor es calentar el banger o nail hasta que la punta quede al rojo vivo, después esperar entre 60 y 90 segundos (según el grosor y material que ocupes). Recuerda que a bajas temperaturas se conserva mejor el sabor y disminuyes el riesgo de dañar tu garganta.

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Usa un carb cap

Este pequeño aditamento hace una diferencia tremenda y es esencial para disfrutar un extracto a bajas temperaturas. Al colocarlo se crea una cámara de aire con un flujo más restringido. Algunos diseños tendrán un agujero único que generará un vacío en la cámara. Entonces se hará un vórtice que enfriará el aire y el vapor el cual quedará atrapado en tu pieza.

La mayoría de los carb cap son similares y funcionan con la capucha y la parte puntiaguda como principales distintivos. La recompensa de usarlo es un vapor fresco, con mejor sabor, así como un mayor control de la presión y temperatura.

¿Cómo funciona?

Ya que el dab esté servido sobre la superficie del nail o banger, cubre el recipiente con el carb cap para atrapar el calor y controlar la presión del aire. Ahora “modula” a tu gusto levantando la capucha de la cámara. Algunos car cab más sofisticados sólo necesitan de darle vueltas para crear un “impulso de aire” alrededor de las superficies calientes en la cámara.

Cuando estés listo para vaciar el vapor, levanta por completo el carb cap e inhala.

Un bong con reciclador

Un reciclador funciona gracias al doble compartimento por el que viaja tanto el aire como el vapor. Esta “vuelta extra” que toma el aire lo enfría a la vez que conserva el sabor. Un jalón de aire fresco implica menos riesgo de escupir en dab por causa de un toque regañón. No hay peor desperdicio que el vapor que toses por culpa de un vapor caliente y rasposo.

Usar un Nectar Collector

Son pocas las personas que prefieren consumir sus ceras en pipas como esta. Entre sus ventajas se encuentra la portabilidad y comodidad. Pero un gran inconveniente es que, al no contar con un recipiente donde depositar el concentrado, este corre el riesgo de resbalarse antes de evaporarse y poder ser absorbido.

Por ello se recomienda apuntar hacia abajo para “atrapar” el vapor que se desprenda mientras acercamos el extracto hacia la punta del taster. Así, todo lo que se evapore irá dentro del “tubo”, sin riesgo a que escurra por cualquiera de los lados.

También es importante no “sumergir” la punta en el concentrado, sino apenas tocar la superficie con ésta. Así se evitará succionar el aceite, el cual obstruiría el flujo de aire.

 

¿Cómo haces tú para no desperdiciar los extractos de cannabis?