La temporada de lluvia hace del mes de agosto uno de los favoritos de la comunidad psicodélica para celebrar a uno de los enteógenos clásicos: el hongo. Tanto hay para decir y explorar de estos seres, pues su relación con la humanidad es profunda y antigua. Hoy revisamos tan sólo algunos aspectos, aquellos que consideramos escenciales.

Crédito imagen

1.- Usos ancestrales

Algunos vestigios arqueológicos hallados en el Sahara sugieren que los humanos han consumido hongos desde hace 7 mil años. En América, se han encontrado evidencias de su uso en ceremonias rituales por todo el continente. En México, durante la llegada de los conquistadores, también se documentó su uso medicinal.

Hay quienes describen esta relación ancestral como una “co-evolución” de ambas especies. Esto, también ayuda a explicar las cosmovisiones de estos viejos pueblos, y su relación con la naturaleza.  

2.- La química detrás de la magia

El compuesto activo de los hongos mágicos se llama psilocibina. A pesar de las similitudes, esta sustancia es mucho menos potente que el LSD. Una dosis de 2.5g provoca efectos perceptibles hasta por 6 horas. En nuestro organismo, este compuesto interactúa principalmente con los receptores de serotonina.

La serotonina es la hormona encargada de regular el humor o estado de ánimo de una persona. Ten en cuenta esto para las siguientes explicaciones.

3.- Principales efectos:

Como en muchas de las sustancias, los efectos varían de persona en persona. Los más comunes incluyen una alteración en nuestra percepción, una ampliación de nuestras emociones, una profunda introspección, y un sentido de comunidad y “conexión” con el otro.

Tal vez el más característico sea la “ego-disolución” o “muerte del ego”, lo que implica una mayor capacidad de empatía y entendimiento de “el otro”. También se sabe que la psilocibina puede “re-configurar” las redes neuronales. esto quiere decir, hacer conexiones diferentes a las comunes.

4.- Usos terapeúticos

En los últimos años, ha resurgido el interés de la comunidad científica por el potencial terapeútico de las sustancias psicodélicas. Algunas investigaciones sugieren que la psilocibina es útil para tratar condiciones como la depresión y tendencias suicidas; adicción a otras sustancias; síndrome de estrés pos-traumático y desórdenes de ansiedad y humor.

También se ha explorado por quienes practican la “microdosis”, lo cual significa consumir tan sólo la décima parte de una dosis regular. Los efectos no son perceptibles, pero hay reportes que aseguran un incremento en algunas capacidades cognitivas.

Terapia piscodélica reduce la ansiedad y depresión en pacientes con cáncer

5.- Reducción de Riesgos y Daños

Uno de los principales riesgos es consumir un hongo venenoso. Esto se evita con la ayuda de un experto o información confiable y de primera mano sobre cómo identificarlos.

Lejos de ello, no se conoce un sólo caso de sobredosis letal de psilocibina. Lo más importante es aplicar las estrategias básicas, como un buen set y setting al momento de consumo; estar con gente de confianza, tener en cuenta el objetivo de la experiencia (espiritual, terapéutica y recreativa) y tener presente que “el viaje” tarde o temprano terminará.

Los riesgos más comunes de un mal viaje con hongos son una alta ansiedad, paranoia y falta de control en nuestras emociones.

Cómo ayudar a alguien durante un mal trip.


Con información de The Third Wave y Dance Safe